La Corriente Federal de Trabajadores (CFT) de la CGT respaldó las medidas implementadas por el Gobierno nacional para preservar "la salud y la vida del pueblo argentino"; reconoció al personal que "en circunstancias tan críticas sale a diario a cumplir tareas esenciales para que el país funcione no obstante la cuarentena" y rechazó y repudió la posibilidad de que se produzcan despidos.
Un documento del espacio sindical, que integran judiciales de SITRAJU, bancarios, gráficos bonaerenses, docente privados, televisión, pilotos de líneas áreas, empleados de farmacia, curtidores y jerárquicos de la energía, entre otras muchas entidades, agradeció a cooperativistas y pequeños y medianos productores que, a pesar del conjunto de dificultades, priorizan "la salud y las fuentes de trabajo", puntualizó.
"La Corriente Federal repudia a los empresarios que obligan a los trabajadores a asistir a los establecimientos cuando sus tareas no fueron incluidas entre las esenciales, y también a aquellos que aprovechándose de la situación y sin justificación económica alguna aumentan los precios de los alimentos", señaló.
Los dirigentes de la CFT calificaron como "aberrante" la conducta de empresarios como Paolo Rocca, de Techint, quien en el contexto de la pandemia procuró despedir a casi 1.500 trabajadores, lo que fue impedido por el Gobierno nacional.
"Para evitar ese tipo de conductas execrables, la Corriente Federal solicita al gobierno que sancione la prohibición taxativa de despedir y que exija la reincorporación inmediata de todos aquellos que ya fueron cesanteados. Cuando millones de argentinos se sacrifican por los demás y ofrecen muestras del valor de la solidaridad, hay pocos que priorizan el dinero e intereses propios", añadió.
Por último, aseguró que como trabajadores "se continuará dando lo mejor para aportar a la superación de la pandemia", y enfatizó que cuando la crisis sea superada "se seguirá poniendo el hombro por un país más justo y solidario".
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