La presidenta Cristina Fernández de Kirchner llegó al Palacio Itamaraty, en Brasilia, donde se celebra la Cumbre Brics-Unasur. Fue recibida por su par de Brasil, Dilma Rousseff. Previamente, frente a militantes, hizo un llamamiento a la paz y a que cese el fuego en Medio Oriente.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner llegó a las 11:13 al Palacio Itamaraty, en Brasilia, donde se celebra la Cumbre entre los países miembro del Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Al arribar al edificio del ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, la Jefa del Estado Argentino fue recibida por su par brasileña, Dilma Rousseff. Luego los mandatarios de todos los países posaron para la foto de oficial de la cumbre.
Previamente, al salir del hotel donde se aloja la comitiva, la Presidenta de la Nación se dirigió a un grupo de militantes brasileños movilizados en apoyo a la Argentina, acompañada por el ministro de Economía, Axel Kicillof.
“No me esperaba tan cálido recibimiento de los jóvenes de Brasil. Quiero darles las gracias, porque sé que no es que están con Cristina sino con las políticas que llevamos adelante desde la Argentina”, dijo la primera mandataria.
“Creemos en una patria grande -continuó- y creemos que se debe terminar en esta suerte de pillaje internacional en materia financiera que hoy están queriendo hacer contra la Argentina, pero que van a intentar llevar adelante contra otros países”.
Cristina se refirió a los conflictos en Medio Oriente. “En un mundo atravesado por la violencia, también hacemos un llamamiento a la paz, a que cese el fuego en Medio Oriente y se termine con tanta muerte, de tantos civiles y de tantos chicos”, reflexionó.
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