La conmemoración se llevó a cabo frente al Monumento Nacional a la Bandera, a orillas del río Paraná, en el mismo lugar donde Belgrano enarboló por primera vez el pabellón nacional, el 27 de febrero de 1812.
"Aquí estamos recordando la figura de unos de los padres de la Patria pero no quiero recordarlo únicamente como el padre de la bandera", sino como a aquel "que tomó las armas para defender la patria" porque "la libertad no hubiera sido posible sin ese éxodo jujeño" que comandó el general Belgrano, expresó la Mandataria.
También memoró que en aquella gesta Belgrano escribió la historia tomando duras decisiones, como cuando decidió ordenar fusilamientos por traición a la patria contra terratenientes que se oponían al éxodo e intentaban negociar con el conquistador español, sólo para cuidar sus propios intereses.
En ese marco, sostuvo que quienes detentan responsabilidades institucionales "para tener solidaridad con los pobres" muchas veces deben "tomar decisiones que molestan a los que más tienen", y defendió esa potestad al señalar que "sino, la solidaridad es solo un ejercicio retórico, y la generosidad es solo un recurso para las campañas".
"Yo quiero una Argentina de políticos, yo quiero una Argentina de legisladores, de gobernadores, de intendentes que se jueguen junto al pueblo como lo hacía Belgrano, sin importar si muchas veces eso nos cuesta cosas", afirmó Cristina Fernández, para agregar inmediatamente que "las cosas siempre cuestan, a Belgrano le costaron, a todos y a todas las que enfrentan esos poderosos intereses mínimos pero concentrados, nos cuesta dejar muchas cosas en el camino". Además sostuvo que la gestión muchas veces expone a los dirigentes "al dolor de sentirse injuriado o agraviado tan sólo por pensar diferente y representar los intereses con los que uno siempre estuvo comprometido".
Asimismo, sostuvo que "necesitamos integrar esfuerzos, hombres y mujeres de los partidos políticos democráticos para seguir profundizando un modelo que en los últimos 7 años ha logrado el crecimiento económico más importante de los 200 años de historia argentina, y que ha logrado convertirnos en el país más igualitario de Latinoamérica".
Para Cristina Fernández, "es necesario seguir trabajando como lo hemos hecho, porque nos hemos demostrado a nosotros y al mundo que este modelo en el que muy pocos creían al principio se ha mostrado firme en el vendaval de los países desarrollados".
"Tenemos que estar orgullosos de lo hecho por los argentinos, porque lo hemos hecho nosotros, sin recetas de afuera, aplicando lo que siempre nos ha hecho grande en la historia: trabajo, esfuerzo, producción y compromiso con los intereses nacionales, los intereses del pueblo", manifestó la Jefa de Estado.
Y concluyó convocando a los argentinos "a seguir marchando, a seguir adelante con este esquema porque todavía faltan construir más bienestar, más educación y más salud para todos los argentinos. Y tengan la certeza de que soy inquebrantable en mis convicciones, y que jamás voy a traicionar lo que pienso, que es la defensa irrestricta de la patria y la nación".
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