Desde temprano, las organizaciones concentraron en las afueras de la Plaza de Mayo. Muchas de ellas no pudieron completar su ingreso porque abarcaban casi diez cuadras. Gobernadores, sindicatos e intendentes también movilizaron.
Una plaza multicolor, llena de banderas de organizaciones políticas, sociales, culturales y gremiales, le puso calor al festejo del 25 de Mayo y los diez años de gobierno kirchnerista, en la que podría considerarse una de las mayores demostraciones de movilización en las calles de los últimos años.
También se le sumaron los carteles y globos con los nombres de gobernadores e intendentes, sindicatos y organizaciones de Derechos Humanos que quisieron mostrar su capacidad de movilización y adhesión al gobierno nacional.
La jornada empezó temprano, a pleno sol, cuando ya cientos de personas se habían ubicado en medio de la plaza, asegurándose el lugar, previendo la marea posterior.
Una de las primeras columnas en llegar fue la Tupac Amaru.
La organización de Milagro Sala, que nació en Jujuy, entró a la plaza cerca del mediodía con sus militantes vistiendo las tradicionales remeras con las figuras de Amaru y el Che.
Kolina, la organización de Alicia Kirchner, movilizó a militantes de todo el país que ingresaron como una ola verde por la calle Alsina, con un camión de bomberos al frente desde donde sonaba una batucada.
Atrás marchaba la Corriente Nacional Martín Fierro, con bombos y banderas azul oscuro, blanco y rojo.
Por la calle Belgrano y encabezada por el titular del Suterh, Víctor Santa María, el senador Daniel Filmus y el efe del bloque de diputados nacionales del FpV, Agustín Rossi, se desplazó la inmensa columna de la Corriente Nacional de la Militancia.
Del otro lado de la plaza se ubicaban las primeras líneas de la gigantesca columna de La Cámpora, que entró por Avenida de Mayo y se ubicó frente a la Catedral.
Las banderas blancas con la insignia de la organización seguían flameando seis cuadras hacia la 9 de Julio.
Entre esa multitud estaban Gabriela, Marysol y Yaqueline, originarias de Santa Lucía, Tucumán, quienes viajaron 18 horas junto con su organización "para acompañar a Cristina".
Detrás estaba la JP Cámpora, donde militan los jóvenes camporistas de los partidos del Conurbano.
La entrada y el centro de la plaza estaban ocupados por personas a las que la jerga militante denomina "sueltas", ya que concurrieron sin enrolarse en ninguna organización.
Allí estaban Anahí y Victoria, que estudian Trabajo Social en la UBA y se encontraron de casualidad en la plaza. "Venimos a festejar el 25 de Mayo y a apoyar al gobierno", señalaron.
Allí también se ubicaron las columnas de Nuevo Encuentro y el Peronismo Militante.
Los Peronistas sin Fronteras mostraban orgullosos sus remeras.
También algunos sindicatos mostraron su presencia, como el SUTERH, la UOCRA, la UOM La Matanza y el FATUM (docentes universitarios).
Vatayón Militante instaló un gazebo al lado de la Catedral.
Ahí cerca se acomodaron las Aliadas, de rosa y blanco, una organización "cristinista" de San Isidro que milita contra la violencia de género, y quedaron rodeadas por la Felipe Vallese, de celeste y blanco, que entró cantando por Diagonal Sur.
El Partido Intransigente y el Partido Comunista mostraron sus rojos estandartes al costado sur de la plaza.
Por Avenida de Mayo, ingresó la columna de H.I.J.O.S.
Atrás, las banderas naranjas de Segundo Centenario y más allá las negras de La Güemes junto con la Corriente Peronista Descamisados.
Las pancartas amarillo fluorescente del Movimiento de Unidad Popular (MUP) ya se ubicaban casi llegando a la 9 de Julio junto al Frente Transversal, donde milita Agustín, de 14 años, a quien le tocó sostener una de las cañas que lleva la pancarta más grande.
"Soy de José León Suárez y vengo porque los jóvenes tenemos que defender lo que se consiguió estos diez años en los que recuperamos la alegría y la fe", dijo el adolescente, que hace una década contaba apenas con 4 años de edad y ayer se estrenaba como militante.
Los estandartes azules del Movimiento Evita marcharon por Avenida de Mayo en un desfile interminable, mientras cantaban la marcha peronista acompañando la versión de Hugo del Carril que se propalaba desde el local del Frente Metropolitano de Técnicos y Profesionales Peronistas.
La columna se extendía desde 9 de Julio hasta el Congreso, donde habían dispuesto cuatro camiones "de la economía popular" en los que se mostraban los productos que fabrican, tales como pastas y panificados.
Allí estaba Blanca, de 47 años, que había venido desde Adacollo, Neuquén, "para apoyar a Cristina".
La estructura de andamios que tapaba la Catedral quedó cubierta con banderas de intendentes y referentes políticos del Conurbano que quisieron mostrar su presencia en la plaza, como Jorge Ferraresi, intendente de Avellaneda; y Mario Ishii, hombre fuerte de José C. Paz.
También estuvieron Fernando Espinoza de La Matanza; Alberto Descalzo de Ituzaingó; y Alejandro y Dulce Granados, de Ezeiza.
Algunos gobernadores también movilizaron a su gente a la plaza y sellaron su presencia con enormes globos, como Francisco "Paco" Pérez, de Mendoza; y Sergio Urribarri, de Entre Ríos.
Fuente: Infonews
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