El gobierno porteño acumula cinco intimaciones desde enero de este año. El 5 de julio el PRO logró que la Legislatura le aprobara la ampliación presupuestaria para cancelar la mora.
La disputa entre las compañías eléctricas y el gobierno de Mauricio Macri, al que le reclaman una deuda de casi 60 millones de pesos por facturas impagas, llegó al límite: Edesur cortó ayer la luz del más emblemático de los símbolos de la ciudad: el Obelisco.
Mientras un puñado de turistas retrataban anoche al monumento porteño en penumbras, la empresa Edenor también dejaba sin energía eléctrica al Monumento de los Españoles y a tres centros comunales, el 12, el 13 y el 15, entre otros lugares. De ellos, anoche sólo seguía sin luz la sede N° 13, que agrupa a los barrios de Núñez, Belgrano y Colegiales, y que atiende a 1500 personas por día.
La empresa Edesur reclama una deuda desde enero pasado de 50,9 millones de pesos, y Edenor de 9 millones de pesos. Ambas firmas habían intimado al gobierno porteño a cancelar esa deuda, que llevó la puja a los tribunales.
En ese camino, la Procuración porteña presentó dos medidas cautelares contra las empresas de energía. La Justicia, por ahora, se expidió en la causa contra Edesur, rechazando el pedido de la Ciudad. Pero los abogados del gobierno local apelaron este fallo y la resolución, en ambos casos, está en suspenso.
Los cortes de luz en la ciudad comenzaron el domingo en siete fuentes de parques y plazas de la ciudad y un organismo público en el área que suministra energía Edesur.
Edenor se sumó a las interrupciones en sitios públicos dejando sin suministro de energía, además, el monumento a Urquiza (Figueroa Alcorta y avenida Sarmiento); el monumento a Garibaldi, en plaza Italia; el monumento a la Flor Nacional (Figueroa Alcorta 2200); en sectores de la plaza Francia, en la avenida Pueyrredón al 2500, y en el monumento a Güemes (Figueroa Alcorta y La Pampa).
También se dejó parcialmente sin energía eléctrica a las plazas Monseñor D'Andrea, en avenida Córdoba y Jean Jaurés; el parque lineal Bullrich, frente al Regimiento de Patricios, y sectores de la plaza Serrano, en Honduras y Serrano.
Hasta ahora, la deuda del gobierno PRO con Edesur y Edenor es de 60 millones de pesos y los cortes, según admitieron a los dos lados de la Plaza de Mayo, no fueron repentinos, sino que acumulan, por lo menos, cinco intimaciones desde enero.
Sin embargo, la mayor previsión sobre ese aumento fue mencionada el 28 de junio, cuando el Ministerio de Hacienda del gobierno PRO envió un detallado documento de 30 páginas a la Legislatura para avalar el pedido de ampliación presupuestaria que solicitó el jefe de Gobierno.
El 5 de julio, por sólo 32 votos de los 60, se aprobó agregar 3438 millones de pesos, a los 32.667 millones que el mismo cuerpo sancionó cuando aprobó el presupuesto para 2012. Según el informe, el gobierno PRO calculó que necesitaba para todo el año, un agregado de 384 millones de pesos para cubrir 336,6 millones faltantes para pagar la luz; los 12,5 para el gas y 35,17 para el agua potable.
Tras la sesión legislativa del 5 de julio, el gobierno PRO ya dispone de ese dinero adicional, pero no lo utiliza "por razones judiciales". Según confirmó una alta fuente del gobierno porteño, "el dinero está en reserva", y no será utilizado hasta que se conozca el desenlace de las dos medidas cautelares presentadas hace dos meses.
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