La cifra significó la mayor de las convocatorias de todos los festejos populares por el 25 de Mayo en más de una década. Sobresalió la presencia de la militancia y miles de familias. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner habló por Cadena Nacional y afirmó que "el futuro vino para quedarse y hoy está más firme que nunca".
Con una Plaza de Mayo cubierta desde mucho antes de las 16, la "Fiesta Patria Popular" de este año no dejó hueco sin cubrir en la plaza y tampoco la avenida de Mayo, donde miles de personas completaban la colorida escena que mezclaba las banderas argentinas con las de la militancia.
En este marco, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner habló al país por Cadena Nacional.
Cristina afirmó que “la unidad nacional que quiero, que necesitamos los argentinos, es lograr que cada vez podamos entendernos más y mejor a partir de la palabra, y con ideas claras, sin agresiones, sin descalificaciones, y sobre todo, sin discriminaciones”.
“Pensemos los argentinos –pidió- dialoguemos los argentinos con palabras, con ideas y que esa unidad nacional sea para ser cada vez más grandes y cada vez mejores”.
Exhortó a que “no nos angustien más a los argentinos; que ayuden a construir la esperanza; que no asusten más a los argentinos, que ayuden a generar fe en el país y en las posibilidades que tenemos, porque mucho hemos hecho pero todavía falta mucho por hacer”.
“Convoco en esta fiesta patria a la unidad nacional, pero no a cualquier unidad; no me interesa la unidad nacional para volver atrás, no me interesa la unidad nacional para no ocuparse de los pobres y los excluidos; no me interesa la unidad que dicen que tenemos que tener algunas culturas que no tienen nada que ver con nuestra historia y nuestras raíces”.
Afirmó que “el futuro vino a quedarse, y hoy está más firme que nunca, y lo vamos a seguir llevando adelante”.
Al recordar al pensador Arturo Jauretche, de quien dijo se inaugurará el mes próximo un monumento en su memoria, consideró la “necesidad de retomar como generación, la formulación de un proyecto de país que tiene sus cimientos y sus pilares fundantes en ese 25 de mayo del 2003, cuando un hombre al que le habían dicho, como a todos los argentinos, que era imposible construir un país donde hubiera trabajo, donde hubiera buenos salarios, donde además los empresarios pudieran ganar plata, dijo que había otra manera de gobernar, otra manera de pensar, y que él la iba a llevar adelante y dejó la vida en eso de llevarla adelante”.
Consideró necesario recordar la gesta patria del 25 de mayo de 1810 “ por el puñado de hombres patriotas, próceres que pasaron a la historia, pero no nos olvidemos del pueblo, porque cualquier esfuerzo individual, cualquier esfuerzo de un puñado de hombres no puede construir la nación” no está “acompañado por el pueblo”.
“Por eso –continuó - siempre debemos recordar que puede haber pueblo y no revolución, pero lo que nunca puede haber es revolución sin pueblo”.
Afirmó que la celebración de hoy “también nos exige nuevos desafíos, nuevos e importantes desafíos a todos los argentinos pero sobre todo a los hombres y mujeres que tenemos vocación política, vocación de organizar participar y dirigir el derrotero de un pueblo en la construcción de una gran nación”.
Sostuvo que “no tenernos que tener miedo a esos desafíos” y recordó que “hoy por la mañana cuando escuchaba la homilía del Tedeum, la primera frase que me impactó y que me quedó repiqueteando, para unirlo a esto que estoy hablando, es cuando se relata la última cena de Jesucristo y en esa cena de pascua, Jesucristo decide apartarse de ritos ancestrales para festejar las pascuas y decide lavarle los pies a sus discípulos para expresar la vocación de servicio la vocación de humildad la necesidad de servir a los excluidos, los pobres, los que menos tienen”.
“Se atrevió –siguió- a cambiar las reglas preestablecidas y eso es lo que nosotros hemos hecho en estos años, pero es necesario, es imprescindible que esto se materialice no solamente en un puñado de ideas, sino en acciones o en gestión”.
La Presidenta señaló que “estamos ante una oportunidad histórica que es cierto , algunos quieren boicotear, que es cierto, algunos quieren sembrar cizaña, algunos quieren dividir y enfrentar” pero advirtió que esos sectores “no cuenten conmigo, voy a seguir trabajando como siempre lo he hecho, por las ideas que creo, con la fuerzas de mis convicciones”.
“Sobre todas las cosas –subrayó- tenemos un futuro que seguir construyendo entre todos , cada vez con más fuerza, con más inclusión”.
Destacó que desde el 2003 “nos reunimos de nuevo en la plaza para celebrar el 25 de mayo, que es la fiesta patria y la recuperación de la nación todos los argentinos”.
Aseguró que “más allá de las formas, más allá del tono” que la caracterizan, “sepan que acá van a tener a una presidenta que jamás va a traicionar los intereses del pueblo y los intereses de la nación”.
El pueblo que festeja el cumpleaños del nacimiento de la nacionalidad con sus hijos, sus padres, sus hermanos, sus artistas, el recuerdo del patriota Arturo Jauretche, la Presidenta cada vez más linda ubicando en el centro del ruedo al tema de la exclusión de los más desposeidos, la multitud contenta, unida y en paz.
ResponderEliminar¿Fin de ciclo? Creo que en realidad se trata de once años con los que recomienzó un ciclo virtuoso que "los que odian" se encargaron de interrumpir cada vez que pudieron. Después de 31 años de gobiernos democráticos y con muchos menos "distraidos" que de costumbre, los derechos recuperados y atesorados ya no serán tan fáciles de conculcar.
Saludos