“En lugar de mantener la continuidad de
la expansión de la red, que se inició durante la gestión municipal de Suárez
Lastra y se continuó razonablemente a lo largo de todos los gobiernos que tuvo
la ciudad, de cualquier signo político, Macri detuvo las obras, frenó las
inversiones".
El ex director de SBASE (Subterráneos de Buenos Aires), Alejandro Franco, aseguró que “mientras
(Mauricio) Macri nos dice que `reinauguró` la línea A, tiene pendiente la
inauguración de dos estaciones: Plaza Flores y Nazca, que ya estarían listas
hace casi tres años, con todo el gasto y el costo que eso supone y creo que no
lo hace porque sabe que incorporar dos estaciones generaría que aumente el
tiempo de espera”.
“No era necesario dejar a los porteños sin la línea A, el cierre y la posterior reapertura tuvo que ver con la impronta que le quiso poner la gestión del PRO como propia, cuando el gobierno nacional fue el que hizo las inversiones en los nuevos vagones, sumado a la puesta en valor de las estaciones, el señalamiento, recomposición de las fachadas históricas”, expresó Franco.
Franco advirtió además, que “hay ausencia de una política de coordinación entre lo que son los instrumentos y herramientas de transporte público y las áreas que tienen que manejar el servicio, como son SBASE y la Subsecretaría de transporte que no trabajan articuladamente, ya que SBASE por ejemplo no tiene facultades para multar a Metrovías”.
Por otra parte, Pablo Martorelli, presidente del Instituto Argentino de Ferrocarriles, expresó que “con la decisión del jefe de Gobierno de subir la tarifa del subte sucederá, como ya ocurrió con los aumentos anteriores, que muchos usuarios dejarán el subte y pasarán al colectivo”, y agregó que “la medida es perjudicial para todos, menos para los empresarios del transporte automotor que verán incrementados sus ingresos”.
En esa línea aseguró que “estos operadores están subsidiados por el Estado Nacional, con lo cual Macri está transfiriendo pasajeros al subsidio nacional, lo que a él le sale gratis”.
Asimismo se preguntó "mientras tanto, ¿cómo quedará la ecuación de equilibrio del operador privado del subte? El aumento de la tarifa y la merma de pasajeros, ¿estará calculada? ¿O generará un nuevo conflicto?".
“La línea A fue renovada en todos sus aspectos tecnológicos y operativos por el gobierno nacional a lo largo de muchos años de trabajo en aspectos como las vías férreas, la línea de contacto eléctrico aérea, subestaciones de transformación de energía, redes de transmisión eléctrica, telecomunicaciones operativas y señalamiento”, indicó.
Además subrayó que “los trenes chinos fueron comprados por el Estado Nacional y entregados a la Ciudad, cuyo actual gobierno local solo los puso en operación apelando a un modo muy dramático, en lugar de hacer un trabajo profesional serio y responsable”.
“En lugar de mantener la continuidad de la expansión de la red, que se inició durante la gestión municipal de Suárez Lastra y se continuó razonablemente a lo largo de todos los gobiernos que tuvo la ciudad, de cualquier signo político, Macri detuvo las obras, frenó las inversiones", aseguró.
A su vez, destacó que "desvió sus fondos del subte a otros usos, cambió la administración de SBASE, y apenas continuó unos pocos metros de la línea H".
Alejandro Nazar Anchorena, gerente y director de SBASE entre 1983 y 1987, y presidente de esa empresa entre 1996 y 2002, también calificó como innecesario el cierre de la línea A y aseguró que "hay que esperar tiempo para evaluar como funciona el servicio después de ese cierre".
En ese marco, expresó que "con respecto a la línea H, considero que se están demorando mucho la obras necesarias para que llegue hasta Pompeya o Retiro como era la idea original, como también que esa nueva línea se una con la línea E, para que haya una única estación en Retiro con cuatro andenes".
Por último, aseveró que "el desarrollo del servicio de subterráneos es la mejor manera de evitar el avance de vehículos en la ciudad, que debería ser un tema preocupante para el gobierno porteño".
“No era necesario dejar a los porteños sin la línea A, el cierre y la posterior reapertura tuvo que ver con la impronta que le quiso poner la gestión del PRO como propia, cuando el gobierno nacional fue el que hizo las inversiones en los nuevos vagones, sumado a la puesta en valor de las estaciones, el señalamiento, recomposición de las fachadas históricas”, expresó Franco.
Franco advirtió además, que “hay ausencia de una política de coordinación entre lo que son los instrumentos y herramientas de transporte público y las áreas que tienen que manejar el servicio, como son SBASE y la Subsecretaría de transporte que no trabajan articuladamente, ya que SBASE por ejemplo no tiene facultades para multar a Metrovías”.
Por otra parte, Pablo Martorelli, presidente del Instituto Argentino de Ferrocarriles, expresó que “con la decisión del jefe de Gobierno de subir la tarifa del subte sucederá, como ya ocurrió con los aumentos anteriores, que muchos usuarios dejarán el subte y pasarán al colectivo”, y agregó que “la medida es perjudicial para todos, menos para los empresarios del transporte automotor que verán incrementados sus ingresos”.
En esa línea aseguró que “estos operadores están subsidiados por el Estado Nacional, con lo cual Macri está transfiriendo pasajeros al subsidio nacional, lo que a él le sale gratis”.
Asimismo se preguntó "mientras tanto, ¿cómo quedará la ecuación de equilibrio del operador privado del subte? El aumento de la tarifa y la merma de pasajeros, ¿estará calculada? ¿O generará un nuevo conflicto?".
“La línea A fue renovada en todos sus aspectos tecnológicos y operativos por el gobierno nacional a lo largo de muchos años de trabajo en aspectos como las vías férreas, la línea de contacto eléctrico aérea, subestaciones de transformación de energía, redes de transmisión eléctrica, telecomunicaciones operativas y señalamiento”, indicó.
Además subrayó que “los trenes chinos fueron comprados por el Estado Nacional y entregados a la Ciudad, cuyo actual gobierno local solo los puso en operación apelando a un modo muy dramático, en lugar de hacer un trabajo profesional serio y responsable”.
“En lugar de mantener la continuidad de la expansión de la red, que se inició durante la gestión municipal de Suárez Lastra y se continuó razonablemente a lo largo de todos los gobiernos que tuvo la ciudad, de cualquier signo político, Macri detuvo las obras, frenó las inversiones", aseguró.
A su vez, destacó que "desvió sus fondos del subte a otros usos, cambió la administración de SBASE, y apenas continuó unos pocos metros de la línea H".
Alejandro Nazar Anchorena, gerente y director de SBASE entre 1983 y 1987, y presidente de esa empresa entre 1996 y 2002, también calificó como innecesario el cierre de la línea A y aseguró que "hay que esperar tiempo para evaluar como funciona el servicio después de ese cierre".
En ese marco, expresó que "con respecto a la línea H, considero que se están demorando mucho la obras necesarias para que llegue hasta Pompeya o Retiro como era la idea original, como también que esa nueva línea se una con la línea E, para que haya una única estación en Retiro con cuatro andenes".
Por último, aseveró que "el desarrollo del servicio de subterráneos es la mejor manera de evitar el avance de vehículos en la ciudad, que debería ser un tema preocupante para el gobierno porteño".
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