martes, 1 de marzo de 2011

La Presidenta dejó inaugurado el período de sesiones ordinarias del Congreso.

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner dejó inaugurado hoy el 129 período de sesiones ordinarias del Congreso, con un discurso en el que defendió enfáticamente el modelo económico vigente, al subrayar que logró "el más fuerte crecimiento económico de los últimos 200 años" y "el desendeudamiento más importante".

La presidenta arribó al Palacio Legislativo, donde fue recibida por dos comisiones parlamentarias, una de exterior y otra de interior, conformadas por diputados y senadores de diferentes bloques legislativos.

En el Salón Eva Perón, la esperaron el vicepresidente de la Nación y titular del Senado, Julio Cobos, el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Fellner y el presidente provisional del Senado, José Pampuro, ante quiénes firmó los Libros de Honor del Congreso.

Luego, la mandataria se trasladó junto a los legisladores, a través del Salón de Pasos Perdidos, para ingresar al recinto de la Cámara de Diputados, desde donde dirigió el cuarto mensaje de apertura de sesiones ordinarias de su mandato.

El plenario se desarrolló en medio de un fuerte operativo de seguridad, desplegado dentro y fuera del edificio del Congreso, donde se dispuso el corte de varias calles aledañas al Palacio.

En la Plaza de los dos Congresos, en tanto, se colocaron dos pantallas gigantes y un sistema de audio para que los referentes de organizaciones sociales, que se concentraron desde temprano en las inmediaciones del Parlamento, puedan seguir las alternativas del discurso de la presidenta.

Al llegar al recinto, la Presidenta -que lucía un conjunto de pollera y camisa negros- fue recibida en medio de fuertes aplausos y una lluvia de papelitos que los militantes arrojaron desde lo alto de los balcones.

"Para Cristina, la reelección", cantaban los referentes de diferentes organizaciones sociales, que se ubicaron en los palcos del tercer piso del recinto, que festejaron la presencia de la presidenta y la recibieron con una fuerte ovación.

El discurso de la Presidenta, se extendió por más de 100 minutos (1:40 hora)y fue aplaudido por los presentes en unas 86 oportunidades.

En los palcos bandeja ubicados a ambos lados del recinto, se sentaron, entre otros, los ministros del gabinete nacional, gobernadores, diplomáticos y embajadores.

En tanto, en otro de los palcos frente al estrado principal, estaban su madre Ofelia Wilhelm y su hermana Giselle, al igual que su hija Florencia.

Entre los ministros asistieron el jefe de gabinete, Aníbal Fernández; de Industria, Debora Giorgi; de Educación, Alberto Sileoni; de Economía, Amado Boudou; de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; de Trabajo, Carlos Tomada; de Defensa, Arturo Puricelli; de Relaciones Exteriores, Héctor Timerman; de Justicia, Julio Alak; de Seguridad, Nilda Garré; de Interior, Florencio Randazzo y de Planificación Federal, Julio De Vido.

También, estuvieron el titular de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti; el Procurador General de la Nación, Esteban Righi; el Secretario de Medios, Juan Manuel Abal Medina; el titular de la CGT, Hugo Moyano; los dirigentes del gremio de los judiciales, Julio Piumato y de taxistas, Omar Viviani; el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.

Asimismo, asistió el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde, que se sentó junto a referentes de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y la histórica dirigente radical, Florentina Gómez Miranda, de 99 años; el titular de la Federación Tierra y Vivienda, Luis D` Elía.

Además, estuvieron presentes los gobernadores de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli; de Mendoza, Celso Jaque; de Entre Ríos, Sergio Urribarri y de Jujuy, Walter Barrionuevo, entre otros.

El párrafo más aplaudido del discurso fue cuando la presidenta anunció la decisión del gobierno nacional de extender los beneficios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) "a todas las mujeres embarazadas" a partir del mes de mayo próximo.

"Néstor no se murió, Néstor vive en el pueblo", cantaron a coro los militantes desde los palcos junto con los legisladores del Frente para la Victoria que lo acompañaron desde sus bancas, luego de que la presidenta anticipara esa medida.

Al finalizar el discurso, la presidenta anunció el envío al Congreso de dos proyectos "uno que tiene que ver con la ley de propiedad de la tierra en la República Argentina, que no tenga un sesgo antiinversor" y otra para establecer "una nueva ley de adopción".










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