La presidenta Cristina Fernández mantuvo sin alteraciones su agenda y anunció una prorróga por dos años del convenio de desendeudamiento para las provincias. Asimismo, la Jefa de Estado destacó que serán 17 las provincias beneficiadas por este acuerdo, sumando a Chubut, que el año pasado había decidido no participar.
De esta forma, la primera mandataria hizo su primera aparición pública en el primer piso de la sede gubernamental luego de la noticia sobre la operación a la que será sometida el próximo 4 de enero en el Hospital Austral.
La jefa de Estado cuestionó durante su discurso las "presiones" que recibe "quien tiene la responsabilidad de conducir el Estado" y que, en muchos casos, provienen de "los sectores con mejores ingresos". "Uno siente que están peleando por privilegios", aseguró.
La titular del Ejecutivo aprovechó la ocasión, por este motivo, para pedir "la colaboración de todos los argentinos" y "la solidaridad para aquellos que reciben buenos ingresos". "Una sola persona no puede, aún cuando trabaje las 24 horas y ponga su salud al servicio del país. Necesitamos que todos pongan su parte y que no se comporten como sectores sino como parte de los 40 millones de argentinos", señaló la mandataria.
La Jefa de Estado consideró: "Es bueno tener derechos pero no cuando se convierte en aristocracia y vence el equilibrio. Todas las veces que no pudimos construir equilibrio tuvimos problemas".
La presidenta también se refirió a la enfermedad por la que deberá ser intervenida quirúrgicamente, y agradeció "todas las muestras de solidaridad, cariño y afecto de todos los argentinos, y también de los presidentes amigos".
La mandataria agradeció especialmente el contacto del presidente de Venezuela, Hugo Chavez Frías, y con humor dijo: "Le dije `vos y tu Congreso`, porque él anda propiciando un Congreso de los que vencieron al cáncer. Te aclaro que les voy a pelear la presidencia honoraria a vos y a todos".
Extendió su gratitud hacia los mandatarios de Chile, Sebastián Piñera; de Colombia, Juan Manuel Santos; de Brasil, Dilma Rousseff; y de Paraguay, Fernando Lugo.
"Quiero agradecerles a todos y pedirles ayuda, no para mí, sino para este país, para los gobernadores, los intendentes, para que todos pongamos más esfuerzo", indicó, y subrayó la importancia de que "el vicepresidente (Amado Boudou) piense lo mismo que el presidente para el que ha sido elegido para gobernar los destinos del país".
En ese marco, la Presidenta pidió que "miren cómo la biología enseña el derecho constitucional más que los jurisconsultos".
En referencia a la operación para extraer un carcinoma a la que será sometida, sostuvo: "Creo haber leído justificaciones jurídicas acerca de la figura del vicepresidente".
"Muchos, quizás, lo pedían de buena fe, con esto de las instituciones entre comillas cuando les convenía, porque cuando no les convino, le pasaron por encima, con desaparecidos, torturados y encarcelados", agregó.
Por último, la Presidenta remarcó: “Vamos a seguir con la misma fuerza de siempre”. “Tenemos que estar al frente, como siempre lo hemos hecho. Haciéndonos cargo de todo. Sin echarle la culpa a nadie. Porque la gente no le interesa que le contemos los problemas, sino que se los resolvamos”, subrayó.
Cristina Fernández consideró que “nadie tiene que dejar de pensar en los 40 millones de argentinos. Es la única forma de sostener el modelo”. “Yo voy a seguir trabajando como siempre lo he hecho, con el mayor de los compromisos”, concluyó.
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