martes, 11 de diciembre de 2012

"Es un grandísimo honor que nos hayan acompañado". La Presidenta agradeció a los curas villeros por "la tarea social"

Cristina Fernández de Kirchner expresó que "es un grandísimo honor que nos hayan acompañado", al referirse a los curas villeros en la inauguración de una réplica del pesebre de El Vaticano.



"Quiero agradecer toda la tarea social y evangélica que cumplen todos los días", subrayó la mandataria mirando hacia los curas villeros, al recorrer en el Museo del Bicentenario, contiguo a la Casa de Gobierno, la exposición de pesebres que reproduce la que se instala tradicionalmente en San Pedro, en El Vaticano.

Cristina dijo que la exposición será exhibida hasta el 6 de enero, y remarcó que "por primera vez sale de la Santa Sede para ser exhibida".


Tras la recorrida, destacó que este "es un pesebre donado a la Argentina por la Fundación Juan Pablo II y lo que está ahí es una maravilla, una reproducción del pesebre que va a inaugurarse el día de la Natividad, en San Pedro".

"Aquí se ha hecho la reproducción y esto ha sido donado al pueblo argentino, quiero agradecer esta distinción, es la primera vez que fuera de San Pedro se reproduce el pesebre que inauguró Juan Pablo II", apuntó.

"Cuando recorría las pequeñas maquetas -sostuvo- recordaba la infancia de todos nosotros, cuando se armaba el 8 el arbolito y el pesebre, a mí lo que más me gustaba era el pesebre".


"A la noche (del 5 de enero) poner el agua, el pasto y los zapatos", memoró Cristina.

Repitió que ahora "los regalos se hacen el 24 por la noche por Papá Noel; cuando yo era chica los regalos los recibíamos el 6 de enero a la mañana".

En la misma línea, la mandataria sostuvo que "Papá Noel no es un personaje nuestro sino trasplantado a nuestra cultura".

Al hablar sobre esas fechas, recordó asimismo: "Un 6 de enero de 1976 nos pusieron presos a Néstor (Kirchner) y a mí en Río Gallegos", y mirando a Alicia Kirchner, la ministra de Desarrollo Social, le preguntó: "¿Te acordás, cuñada?".



Más adelante, sostuvo que "para todos los argentinos, a los que arman el pesebre, a los que no arman porque tienen otras creencias", hay "un valor que es inmanente a todo ser humano y es el deseo de paz, amor por la familia, al prójimo".


Asimismo, la jefa de Estado les deseó "a todos unas muy felices fiestas".

En el inicio del acto, un locutor leyó la nota que la Fundación Juan Pablo II para la Juventud le envió a la Presidenta, en la que le comunicaba "la realización de los pesebres de San Pedro en Argentina, copia en escala del realizado en la plaza San Pedro en la Navidad de 2012".

"Jamás en la historia el pesebre fue replicado e inaugurado en otros países", subrayó la Fundación.

La muestra "Los Pesebres del Papa. Modelos para los pesebres de la Plaza de San Pedro y de los Palacios Vaticanos", ahora expuesta en el Museo del Bicentenario bajo el nombre "Los Pesebres de San Pedro en Argentina", se vincula directamente a la ya consolidada tradición navideña del Pesebre en la Plaza San Pedro, en el Vaticano.


Cristina estuvo acompañada por el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; el nuncio apostólico Emil Paul Tscherrig; un grupo de curas villeros y el maestro artesano Francisco Artese, quien visita la Argentina para supervisar personalmente la réplica a escala del pesebre.

También estaban los ministros de Planificación, Julio de Vido; de Relaciones Exteriores, Héctor Timerman; de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; de Defensa, Arturo Puricelli; el viceministro de Economía, Axel Kicillof; el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; el de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro; y el de Culto, Guillermo Oliveri.

Fue el beato Juan Pablo II, siguiendo las huellas de la gran tradición de su tierra natal, quien decidió colocar en los primeros años de su pontificado un gran nacimiento delante de la Basílica Vaticana no solo para los fieles sino también para la alegría de todos.

Creado y construido por Artese, con una superficie aproximada de 80 metros cuadrados, será por primera vez exhibido fuera del Vaticano, siendo Argentina el primer y único país elegido para ello, y posteriormente será donado a la Presidencia de la Nación.

Según el Vaticano, Artese es considerado uno de los "más importantes representantes de la escuela meridional de los pesebres". 


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