Muchísimas familias con pacientes electrodependientes tuvieron que ser auxiliadas por la Asociación Argentina de Electrodependientes (Aaded) a raíz de los masivos cortes de luz.
Según denunció la Aaded, las personas electrodependientes no contaban en sus domicilios con la Fuente Alternativa de Energía (FAE), un generador que deben proveerles las empresas distribuidoras de acuerdo a la Ley de Electrodependientes sancionada en 2017.
La condición para recibir esa asistencia es la de estar inscripto en el Registro de Electrodependientes por Cuestiones de Salud, pero "la Secretaría de Salud está demorando el ingreso de nuevos registros", denunció el titular de la asociación Mauro Stefanizzi.
Stefanizzi calificó de "ilógicas" las demoras que la degradada Secretaría de Salud está teniendo para incorporar a los personas electrodependientes "ya que su ausencia en el registro sirve de excusa para las empresas que no otorgan prioridad de atención" en un trámite que no debería demorar más de 15 ó 20 días, pero "hay familias que presentaron el pedido en septiembre del año pasado y siguen esperando", resaltó el titular de Aaded.
Otra de las trabas que la asociación viene denunciando para la aplicación de la norma votada hace dos años es el requisito de la verificación de la instalación eléctrica de la vivienda. "Las familias no cuentan con los 5 mil pesos que cuesta la certificación de la instalación eléctrica domiciliaria por parte de un electricista matriculado", apuntó Stefanizzi.
De los más de 50 casos que la Aaded asistió, el más angustiante fue el de Facundo González, un joven de 23 años, que permaneció casi 20 horas sin servicio eléctrico para las cuatro máquinas que lo asisten por su cuadro de malformación craneal congénita. En su caso no estaba inscripto en el registro de electrodependientes por demoras en el trámite en Salud. "Es la primera vez que se corta por tanto tiempo y en Edesur me decían que tengo que esperar, pero él no puede esperar", lamentó Edith González, madre de Facundo.
Edith describió que durante las 17 horas que permaneció sin suministro eléctrico, su hijo no pudo alimentarse porque "no funcionaba la máquina de infusión enteral, al igual que el respirador artificial, el aspirador de secreciones y el colchón antiescaras". La mujer, repasó los malos momentos que atravesó sin asistencia en el corte de luz: "Para los papás esto es algo desesperante porque ves que a tu hijo le falta el aire y no podés hacer nada más que respiración manual, como hicimos toda la noche mientras esperábamos el grupo electrógeno".
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