La Presidenta habló hoy por la cadena nacional y reclamó a los ciudadanos que no permitamos que nos traigan conflictos que están causando desolación, muerte y agobios en otras partes del mundo. Reivindicó su derecho a hablar todas las veces que quiera hablar.
Cristina Fernández de Kirchner pidió hoy, por cadena nacional, a los argentinos, que “no traigamos el drama y la tragedia de cuestiones remotas del mundo, donde matan, torturan, tiran bombas y misiles, que no tienen nada que ver con nuestra historia y con nuestra realidad”.
“Por favor –apeló la Presidenta, en el final de su discurso- “toda es mugre que hay afuera, que por favor nadie la traiga adentro: defendamos a la Argentina, más que al Gobierno”.
Insistió en que “no permitamos que nos traigan acá conflictos que están causando desolación y muerte y agobios, y no permitamos que nos dividan: vayamos a las próximas elecciones en paz, con tranquilidad, con alegría, para que el pueblo vote y se exprese”.
Antes de su mensaje por la cadena nacional, la Presidenta anunció en la Casa Rosada el aumento del 18,26 por ciento de las jubilaciones a partir del 1 de marzo próximo, con lo cual el haber mínimo pasará de 3231,63 a 3821,73 pesos.
Asimismo, se firmaron convenios de desendeudamiento con 17 provincias, se inauguraron trenes cero kilómetro del ramal José León Suárez de la línea Mitre, y se anunció que se invertirán 152 millones de pesos en la reparación del aeropuerto de Trelew.
Al inicio de su discurso mencionó los logros alcanzados para superar el endeudamiento interno y externo del país y para ir cumpliendo con la deuda social que, afirmó, “es la que más humilla”, y enumeró los beneficios logrados gracias a la estatización de las AFJP, de YPF y de Aerolíneas Argentinas.
También destacó que “están veraneando millones de argentinos, batiendo récords en todas las plazas turísticas”.
Hizo entonces una “interpretación sociológica” al considerar que a los argentinos “los asustaron tanto durante todo el año, le metieron tanto miedo a que se iban a quedar sin salario, que los fondos buitres no iban a ‘hacer bolsa’, que la inflación real ‘iba a llegar a 800 mil por ciento’, que ‘en enero a Cristina la hacen bolsa porque van a revelar historias secretas’, y la gente se asustó y qué hace cuando tiene miedo, deja de consumir”.
“Cuando llegó diciembre –continuó Cristina- nos encontró con más reservas de las que nosotros mismos pensamos, vieron que el dólar estaba como tenía que estar, y sentí que la gente sintió como una liberación y fue a disfrutar, a comprar para las fiestas y fue a disfrutar a las playas”.
“Qué fin de año distinto imaginaron no para el gobierno, porque pensaban que era para el gobierno, pero en realidad era para la gente”, comentó.
Sostuvo que “afortunadamente los argentinos han tenido un fin de año que todos recuerdan como el mejor, no solo de la última década sino de muchas décadas, y esto nos pone muy contentos”.
Informó que “ayer firmé el decreto con la República de Alemania y con todos los miembros de la Unión Europea porque se está formalizando la renegociación de la deuda con el Club de París, ya que este año vamos a pagar la segunda cuota
También recordó que hoy viaja a China en visita oficial.
“Quiero decirle a todos los argentinos que en silla de ruedas, con la pata al hombro, como sea, esta presidenta va a estar al frente del barco, como siempre lo ha hecho, al frente de ese barco al que quieren escorar, y que algunos quieren hundir”.
También se refirió a declaraciones “del vicepresidente de una ong que nuclea a jueces, magistrados y fiscales, quien dijo que yo no debería opinar ni hablar”.
“Todos los argentinos –respondió Cristina- somos iguales: la libertad de expresión y de prensa es para los 40 millones de argentinos, incluida la presidenta” y ese derecho debe ser respetado, dijo, “no solamente para los que critican, que tienen todo el derecho de hacerlo, pero también a los que insultan, agravian, descalifican a todo el gobierno, esa libertad es también para nosotros, los que pensamos de otra manera, porque en eso radica la libertad, en que todos puedan hablar”.
“Es –siguió- como si yo dijera que los jueces y fiscales solo deben hablar por sus sentencias y dictámenes , pero los habrán escuchado todos los días hablar de lo que piensan y lo que se les ocurre y están en todo su derecho”.
Advirtió entonces que “yo voy a hablar todas las veces que quiera hablar” porque como dice el artículo 16, el más importante de la Constitución: “Todos los argentinos somos iguales”.
“Por eso –agregó- con el mismo derecho y la misma aceptación que tengo respecto de cada palabra que se vierte sobre mi persona, sobre cada información u opinión que se vierte en la red sobre mi persona –voy a recordar un twit que alguien me dedicó el 8 de setiembre del 2013 , el día que le dábamos media sanción a las leyes de democratización de la justicia, alguien me dedicaba un twit” con insultos y “jamás se me hubiera ocurrido decir ‘cállese la boca y no hable´o demandarlo por semejante insulto”.
“En Argentina todo tiene que ver con todo –destacó Cristina- y si estamos con estos niveles de agresión a mi persona, yo estoy dispuesta a seguir aceptándolo y no me voy a mover ni un milímetro de lo que pienso ni me van a amargar”.