martes, 8 de noviembre de 2011

Ya hubo once muertos, desde que se hizo el contracarril en Pueyrredón

La avenida Pueyrredón pasó de no registrar siniestros viales graves a superar la decena de fallecidos en menos de tres años. Más de la mitad de las víctimas murieron en impactos frontales.

Las imágenes del choque en el cruce de la Avenida Pueyrredón y Mitre que el domingo arrojó el saldo de dos muertos y 45 heridos sobresalen por el impacto. Una cámara de seguridad registró el golpe del Renault Clío con el autobomba y, luego, el de ambos con el colectivo 188 que, 100 metros más adelante, se incrustó en el bar La Perla.

Acaso con una contundencia similar por lo incontrastable, surgen los datos de las tragedias viales sobre la avenida desde que se impuso el contracarril. Concretamente, en la Asociación Amigos de la Avenida Pueyrredón denuncian que desde el 27 de febrero de 2009, cuando debutó el cambio, once personas perdieron la vida y 130 resultaron heridas.

Y todavía más sorprendente es la cifra de que 6 de los fallecidos corrieron esa suerte tras impactos frontales, es decir, imposibles de generarse con una mano única.
Nelson Durisotti, vocero de la Asociación, explicó que, “cuando se hizo este cambio nos dijeron en la Defensoría del Pueblo que no había registros de siniestros viales graves en la avenida. Diez días después comenzamos a lamentar la primera víctima, María Díaz, de 73 años, que fue atropellada al cruzar la calle”.

La asociación planteó con esos datos un amparo judicial, pero la justicia no le dio la razón. Durisotti rememora que “el fallo de Cámara deja en claro que si bien rechaza nuestra petición, corresponde al gobierno local velar por la seguridad vial y claramente no lo hace”. Según su visión, el cambio de sentido del tránsito es una medida aislada. “Puede haber muchas soluciones, preventivas, sancionatorios, etc., pero fundamentalmente hay que volver a como estaba antes, porque está claro que no solucionó ningún problema y generó otros”.

En el caso puntual del choque del domingo, de no existir las dos manos, la autobomba y el auto no hubiesen impactado contra el colectivo. “Es una cuestión elemental y fácil de comprobar. No hubiese estado allí. No hay controles ni preventivos ni sancionatorios y, entonces, los problemas van incrementándose”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario