Un incendio que se desató en el interior de una vivienda del barrio Zatti de Viedma, produjo la muerte de siete personas y un herido grave. Las víctimas serían la madre y sus seis hijos. El padre, está internado en el Hospital con heridas profundas producidas por el fuego y su pronóstico es reservado.
Entre la noche del miércoles y madrugada del jueves murieron calcinados una madre y sus seis hijos.
Fue en un mono-ambiente donde vivían en condiciones de hacinamiento.
Se trata de Debora Hualquillan de 27 años, junto a sus 6 hijos: Luján, Ayelen, Natacha, Félix, Yahir y Maximiliano, todos niños que tenían entre 12 a 1 año de vida.
El padre de los chicos, Jonathan Sanzana, sigue peleando por su vida con el 80% de su cuerpo afectado por las quemaduras.
Un hermano de la madre y tío de los niños también fue afectado por las llamas pero estaría fuera de peligro. Ambos intentaron entrar a la vivienda para salvarles la vida.
Las condiciones de vida de la familia las detalla el relato del comisario Tellería ante los medios. Allí precisó que la vivienda era de unos 5 metros de largo y 2 metros de ancho. "Era un lugar que tenía el sector de la cocina y el sector de lo que sería la habitación para dormir todo junto, separado por un mueble mediano en el lugar".
Pero no solo se trata de las condiciones de hacinamiento de 8 personas en un mono-ambiente de 10 metros cuadrados. Como detalla el abuelo por las redes sociales, la familia estaba construyendo una habitación para las niñas sin poderla terminar. El padre de los niños, Jonathan, está desocupado. Y con el enorme aumento de los precios de los materiales de construcción se hizo imposible terminarla.
Las causas del incendio al parecer se habrían desatado al querer secar unas prendes de ropa que, al ser afectadas por el fuego justo frente a la única puerta y ventana del mono-ambiente, impidieron que la familia pueda salir de la misma.
Pero esta tragedia sólo puede encontrar explicación si se toman en cuenta las reales condiciones de vida de enorme empobrecimiento de un sector de la sociedad, del cual Debora y su familia eran parte.
Ya se vio en el invierno, cuando los niños Emanuel y Daiana fueron encontrados abrazados con sus cuerpos incinerados por las llamas de su casilla precaria donde vivían en el barrio denominado Lote Silva.
Ambos niños estaban solos, debido a que la madre debía realizar todas las tareas del hogar e ir por trabajo.
Estos desgarradores hechos donde es afectada por enormes tragedias de la vida, son una foto de la pauperización y precarización del conjunto de sus condiciones de vida. Estas desigualdades las generan gobiernos como el de Cambiemos.
Fuentes: LID/ADNRioNegro
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