En el programa Duro de Domar, la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, habló de su historia, la pérdida de sus dos hijos, su nuera, su fuerte pasado y el presente de su organización.
Kika, como era conocida antes de comenzar con su militancia, habló de su vida, de automovilismo, de su pasión por Ortelli al volante, y confesó que, dentro de la organización, la nombraron "la máquina de joder" por su insistencia a la hora de empujar al resto de las madres a protestar y militar.
Tambien habló de política y remarcó su cercanía con Aníbal Fernández y Sergio Urribarri, a quien calificó de "genial, muy sincero", a la hora de referirse al futuro de la política nacional.
Consideró que Macri debería ocuparse de educar a Antonia y que "Massa es una masita".
Pero también hubo lugar para recordar el pasado; "La militancia de mis hijos yo nunca la cuento porque no creo que tenga que ver. Ellos militaban, hay 30 mil desparecidos", comentó.
Respecto a su lucha en la última dictadura militar argentina, describió cómo era su casa en una de las épocas más duras y crudas que vivió el país. "En mi casa había mucho pibe, se quedaban tres meses a veces los amigos de mi hijo. Lo hacia más por madre protectora que por entender. A mi me hubiera gustado que, si mi hijo estaba en esa situación, alguien le de una mano", dijo.
"Raúl pasó a la clandestinidad enseguida y eso es muy duro porque ya no está en tu casa. Y no recibís llamados, rogás que lo ayuden. Cuando desapareció con las otras madres escribíamos en billetes que teníamos hijos desaparecidos, para que la gente se entere porque nadie te miraba. Era muy difícil", sostuvo.
Hebe contó también que Rafael Correa, Evo Morales, Néstor Kirchner, Cristina Fernández, Aníbal Fernández y Gabriel Mariotto recibieron como galardón el famoso Pañuelo Blanco de las Madres, luego del líder cubano Fidel Castro, quien fue el primero en recibirlo en reconocimiento a su lucha por los derechos humanos.
Para finalizar, una de las caras de los Derechos Humanos más importante del mundo, habló del Fútbol para Todos y del mundial del año 78, "yo no critico a quienes iban a ver los partidos, el fútbol es pasión. Y a nosotras nos sirvió para hacernos conocidas internacionalmente. Y me parece bien que se mezcle la política en el deporte hoy, el kirchnerismo no tiene nada que ocultar. Deberían pasar los discursos de Néstor siempre, mostrar todo lo que hace este gobierno por la gente", sostuvo al referirse a la utilización del fútbol en la dictadura para ocultar el caos y las desapariciones.
Fuente: DiarioRegistrado
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