viernes, 12 de agosto de 2011

Los ministros de Economía de la UNASUR comienzan a debatir para consolidar la solvencia frente a la inestabilidad de los mercados internacionales.

El denominado Grupo de Trabajo de Integración Financiera (GTIF) con funcionarios de los ministerios de Economía y bancos centrales de los doce países que componen la UNASUR, tomó en consideración los tres capítulos planteados por el ministro de Economía, Amado Boudou, como base para la construcción de una arquitectura financiera regional que consolide la solvencia externa frente a la inestabilidad de los mercados internacionales.



Ayer se reunió el denominado Grupo de Trabajo de Integración Financiera (GTIF) con funcionarios de los ministerios de Economía y bancos centrales de los doce países que componen la UNASUR, quienes analizaron las distintas medidas y redactaron un acta con un plan de acción que será refrendado hoy por los ministros que comenzaron a llegar anoche al país.

Los ministros trabajarán en la agenda acordada durante la reunión extraordinaria celebrada en Lima, Perú, el viernes último.

En la apertura del encuentro -que se desarrolla en el hotel Alvear- participaron ayer el viceministro de Economía, Roberto Feletti; la secretaria general de la UNASUR, María Emma Mejía; el secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino; representantes de la Cancillería argentina, el presidente del Banco Central de Venezuela, Nelson Merentes; y técnicos de economía de bancos centrales del resto de los 12 países que componen el bloque.

Según trascendió, durante la jornada se avanzó en la ampliación de un fondo de reservas anticíclico para toda la región (FLA), similar al que ya utilizan Perú y Ecuador. En este punto queda por definir el monto final con el que contará.

También avanzaron en la creación de una comisión interbloque que tendrá como tarea detectar la existencia de medidas y trabas paraarancelarias a nivel intraregional, de manera de poder corregirlas y apuntalar de esta manera el comercio entre los países miembros.

De esta forman buscarán hacer frente en parte a la caída del comercio mundial que se espera producto de la crisis internacional que sacude a los principales mercados del mundo.

Asimismo, se resolvió reforzar el financiamiento regional, con una mayor capitalización de la Corporación Andina de Fomento (CAF), y la ratificación del apoyo de los países miembros de la UNASUR a la creación del Banco del Sur, que requiere la aprobación legislativa.

Sobre este último punto el análisis se centra en ampliar la participación a todos los países miembros de la UNASUR y no restringirlo a las siete naciones -Argentina, Venezuela, Brasil, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Ecuador- que comprometieron su participación desde el inicio del proyecto.

A la vez, se fomentará el uso de monedas regionales para el comercio exterior, como el sistema denominado `SML` implementado por Argentina y Brasil, al que se podrían sumar Chile y Uruguay en breve, y el Sucre, para los países andinos.

El documento con medidas consensuadas será elevado para su tratamiento y aprobación al Consejo Sudamericano de Economía y Finanzas de la UNASUR, que sesionará formalmente mañana.

El GIFT tomó en consideración los tres capítulos planteados por el ministro de Economía, Amado Boudou, en Lima, como base para la construcción de una arquitectura financiera regional que consolide la solvencia externa frente a la inestabilidad de los mercados internacionales, dijeron a Télan funcionarios que participaron del encuentro.

En el documento final también se mencionarán medidas macroprudenciales, como son la imposición de control de capitales golondrinas, y se buscará consolidar el sistema de tipo de cambio flexible, con el objetivo de atenuar los potenciales impactos que pueden aparecer a causa de la apreciación cambiaria de las monedas de las región respecto al dólar, debido a la prolongación de la crisis en Estados Unidos.

Antes de partir hacia Buenos Aires el ministro de Economía de Brasil, Guido Mantega, sostuvo que América Latina tiene un mejor desempeño que Europa y Estados Unidos, y que el objetivo del encuentro apuntó a "preservar" esa situación a partir del fortalecimiento de las relaciones entre los países y "un mejor uso de nuestros mercados y relaciones comerciales".

De esta forma, el bloque sudamericano, por primera vez, se compromete a dar una "respuesta política regional" para enfrentar la crisis y la debilidad de las potencias mundiales.

"Tenemos un desafío histórico espectacular que es cortar con una historia de 200 años de desencuentros en Latinoamérica. Ahora hay una nueva sintonía, estamos trabajando juntos y sin duda Sudamérica va a ser uno de los motores de la economía mundial", expresó Boudou el viernes en Lima.

La agenda del encuentro tiene previsto la tradicional foto con todos los ministros de Economía y presidentes de Bancos Centrales de la UNASUR.

Luego, se expondrán las actuaciones del Grupo de Trabajo de Integración Financiera durante los cuatro años de trabajo.

Más tarde se aprobará el Plan de Acción del Consejo Sudamericano de Economía y Finanzas tras lo cual, a las 16.30, en el Hotel Alvear, se brindará una conferencia de prensa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario