Un incendio en un inmueble sobre la calle Páez 2796, Flores, provocó la muerte de dos niños de 10 y 7 años que dormían en el sótano de un taller textil clandestino. El lugar había sido denunciado ante la Justicia porteña en septiembre de 2014.
No es la primera vez que el incendio de un taller textil ilegal causa la muerte de criaturas. El 30 de marzo de 2006, un incendio en otro taller clandestino del barrio de Caballito provocó la muerte de seis personas, cuatro de ellas chicos.
Nueve años después, la Ciudad vive un hecho similar en un sector, el textil, largamente denunciado por violación de los derechos laborales y reducción a la servidumbre.
Los hechos
El fuego se produjo cerca de las 10.30 del Lunes 27 de abril de 2015. La puerta de ingreso, como suele suceder en los talleres ilegales, estaba tapiada. El incendio afectó principalmente al subsuelo donde dormían los pequeños, que resultaron muertos. También sufrió graves quemaduras a una mujer de 40 años que fue trasladada al Hospital Alvarez, según coincidieron en señalar voceros policiales y del SAME.
“Los dos niños varones fallecidos aparentemente estaban durmiendo y no llegaron a salir de la vivienda”, relató Alberto Crescenti, director del servicio de emergencia SAME. “Lamentablemente pudieron escapar los padres pero los niños no”, dijo Claudio Maggi, a cargo del operativo de los bomberos de la Policía Federal.
En el lugar se encontraron máquinas para la confección de ropas y rollos de tela.
“Normalmente en estos lugares las instalaciones eléctricas son demasiado precarias y no habría que descartar que un cortocircuito haya sido el causante del incendio”, apuntó el jefe de los bomberos.
"Los talleres de Flores abastecían a Juliana Awada"
El inspector Castro, reconocido por haber denunciado las irregularidades en el depósito de Iron Mountain tres años antes de que se produjera el incendio que le costó la vida a diez bomberos, responsabilizó directamente a dos funcionarios del Gobierno porteño por el incendio del lunes en el taller clandestino ubicado en la calle Páez 2796, en el barrio de Flores, que se cobró la vida de dos niños -de siete y diez años- que no pudieron escapar.
"Los responsables de la falta de control y la impunidad de estos talleres son Fernando Macchi y Ezequiel Sabor", dijo Castro, en alusión al director general de Protección del Trabajo y subsecretario de Trabajo porteño, respectivamente.
Es que para Castro, "lo de ayer es absolutamente evitable", al tiempo que denunció que "existe una matriz para proteger los negocios de los amigos y los socios" con "Iron Mountain como el mejor ejemplo".
En diálogo con Casi Despierto, Castro aseguró que "Macchi el es el responsable en este caso", aunque aseguró que "el jefe de Gobierno (Mauricio Macri) no lo va a echar porque es parte de una estructura de protección. Esto no es una casualidad ni un accidente, sabemos que estos talleres abastecían a (Juliana) Awada, la esposa de Macri. Son amigos de esta gente". "¿Por qué no lo echa? Porque el jefe de Gobierno es parte de una matriz de corrupción", concluyó Castro.
Denuncian penalmente a Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal
"Presentamos una denuncia por los delitos de abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario y encubrimiento contra Vidal, Rodríguez Larreta, el subsecretario de Trabajo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Ezequiel Sabor, y el director Ejecutivo de la Agencia Gubernamental de Control, Juan José Gómez Centurión", confirmó Lucas Schearer, de la organización La Alameda.
La denuncia, realizada por el legislador y titular de La Alameda, Gustavo Vera, fue radicada en el Juzgado Federal N° 12, a cargo de Sergio Torres, y en la Fiscalía N°2 de Carlos Rívolo.
Según Vera, "Vidal y Rodríguez Larreta estuvieron abiertamente, como altos funcionarios del gobierno porteño, diciendo que jamás tuvieron conocimiento de este taller, y documentos del gobierno de la ciudad que dictan todo lo contrario".
El documento al que hace referencia el legislador es la nota con fecha del 21 de noviembre de 2014 en la que el gobierno de Mauricio Macri informaba a la Justicia que "no se registran inspecciones en materia de Higiene y Seguridad" en una serie de domicilios, entre ellos el de Páez 2796 en el barrio de Flores, donde el lunes murieron dos niños en un incendio.
De esa manera el Ejecutivo porteño respondió a un pedido de informes solicitado por la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex), entidad a la que La Alameda pidió en septiembre pasado que se investigaran alrededor de 40 direcciones donde podían funcionar talleres textiles clandestinos.
"La falta de reglamentación de la ley 3.019, que permitiría regular la actividad de estos talleres, combinado con la falta de control, demuestran cuál es la intencionalidad de política pública", aseguró por su parte Cecilia Segura, presidenta de la Auditoría General de la Ciudad (AGC) de Buenos Aires.
La Dirección General de Protección del Trabajo porteña, a cargo del control, demora "hasta 920 días en expedirse sobre las actas de inspección realizadas", señala un informe de la Auditoría al que tuvo acceso Télam.
En este sentido, el reporte asegura que "de las 48.800 inspecciones programadas, sólo se hicieron 35.805 (un 25 por ciento menos)".
"El cuerpo de inspectores cuenta sólo con 109 agentes (42 por ciento de su personal). Teniendo en cuenta los días laborables por año, la cifra de 35.805 inspecciones es, al menos, llamativa ya que estaríamos hablando de muchas inspecciones por día", detalló Segura en diálogo con Télam.
En cuanto a la efectividad de las sanciones, el mismo informe señala "tanto la falta de actualización de los valores (que datan del año 1999) como tardanzas excesivas en el proceso para la aplicación de las penalidades".
Por su parte, la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) pidió hoy la renuncia del titular de la Dirección de Protección al Trabajo porteño, Fernando Macchi, por considerarlo "responsable" de la explotación laboral en talleres clandestinos y adelantó una movilización para el 7 de mayo a la Subsecretaría de Trabajo.
"La Dirección que tenía que controlar que este tipo de situaciones no ocurriera fue desmantelada", manifestó el titular de la central gremial Hugo Yasky, en una conferencia de prensa realizada en la sede de la CTA.
A su turno, el titular de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), Cristian Miño, reivindicó que "los trabajadores en cualquier lugar y específicamente en la Ciudad de Buenos Aires puedan tener las condiciones que corresponden".
"Estamos a favor de cerrar todos los talleres clandestinos pero somos conscientes que los trabajadores no son los responsables de esto y tenemos que impulsar un sistema para que se puedan convertir en cooperativas de trabajo", añadió.
En tanto, legisladores porteños de distintos partidos políticos elevaron al menos seis pedidos de informes a la Administración conducida por el PRO para conocer las inspecciones efectuadas al taller textil de Flores que se incendió, donde murieron dos niños, y las denuncias sobre la existencia de trabajo esclavo en el lugar.
Fuentes: DiarioZ/Politicargentina.com/Télam
No hay comentarios:
Publicar un comentario