Uno de los momentos más aplaudidos del discurso de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, durante un acto en la localidad santacruceña Comandante Luis Piedra Buena, estuvo dedicado al jefe de gobierno porteño Mauricio Macri. La presidenta ironizó sobre el cambio de opinión del fundador del PRO, quien primero criticó el proyecto para expropiar el 51% de YPF y luego dijo que, si llegara a ser presidente en 2015, dejaría a la petrolera en manos del Estado.
“También hay algún otro (por Macri), que algún día se levantó porque había visto a su nena y le había parecido que todo estaba mal. Y se ve que al otro día alguien le habrá mostrado alguna encuesta. O la nena será más inteligente que el padre y le habrá dicho ‘qué gansada estás diciendo’. Y salió a recomponer la situación”, comentó la jefa de Estado con una sonrisa.
El martes, en su primera referencia a la nacionalización de YPF, Macri dijo que la noche anterior había estado “desvelado”, que se había acercado a su pequeña hija Antonia y que entonces se había dado cuenta sobre “el error” que significaba apoyar la expropiación del 51% de las acciones de la petrolera.
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