Es difícil saber si a Macri se le escapó o fue un acto de honestidad. Lo cierto es que el jefe de gobierno reconoció que detrás de las decisiones que toma la oposición hay un “círculo rojo” que digita el camino a seguir y admitió que son los mismos que promovieron su alianza con Massa.
Mauricio Macri durante el último fin de semana tuvo reportajes en los diarios Clarín, La Nación y Perfil, expresando su decisión de ser candidato a presidente.
Pero también tuvo un "sincericidio" y dio detalles sobre la existencia de un “círculo rojo” de la política, el cual integran representantes de diferentes ámbitos del poder y algunos medios de comunicación, a quienes definió como “personas del mundo del hacer, del pensar”, que impulsaron una alianza entre el Pro y el espacio de Sergio Massa para terminar con el Kirchnerismo en Argentina.
Todo parece indicar que llegada al gobierno, las aspiraciones de la enigmática secta serían: Shock devaluatorio, concesiones a grupos económicos, y “otras decisiones que con otros gobiernos ni siquiera habría que discutir”.
También reconoció que los miembros del “círculo rojo” son los mismos que hace dos años lo quisieron juntar con el ex presidente interino Eduardo Duhalde. Hasta admitió que estos sectores “hoy están tranquilos” porque consideran que en el gobierno de Cristina Fernández “hay debilidad”.
Macri no negó que el Grupo Clarin sea integrante de ese armado, y se limitó a contestar: “No lo personalizaría en alguien”. Es decir, no ha cambiado, es el mismo dirigente que “quería tirar a los Kirchner por la ventana”, que habla de funcionamiento de los tres poderes y ha vetado un centenar de leyes, y que gobierna la ciudad para una determinada élite.
Pero es alguien que acepta la agenda impuesta desde los medios hegemónicos y entonces todo se olvida: hasta la mas grande crisis que sufrió el pueblo argentino en su historia.
Uno de los primeros en pronunciarse sobre los dichos de Macri fue el diputado nacional Francisco de Narváez. "Si hay alguna sospecha o insinuación de esta naturaleza la debe aclarar y punto. Se debe es ser claro y no ambiguo, pero la verdad es que no tengo idea respecto de qué es", expresó quien supo ser aliado del jefe de gobierno porteño, en declaraciones al canal A24.
Dentro de las filas oficialistas, las opiniones fueron taxativas. "Hay una agenda que no la suele marcar la oposición política, sino estructuras corporativo mediáticas que van delineando su estrategia y definen qué candidatos son más visibles y les pueden funcionar mejor", opinó el el filósofo y candidato a legislador por el FpV, Ricardo Forster.
"Seríamos ingenuos si imaginamos que el Grupo Clarín y los editoriales de La Nación no van marcando agenda", agregó.
La interpretación coincide con el análisis del periódico Tiempo Argentino, en donde se habla directamente de un "establishment que trabaja para debilitar al gobierno nacional".
Por su parte, el dirigente Luis D´Elía utilizó su cuenta de Twitter para declarar: "CÍRCULO ROJO lo forman Magnetto, Paolo Roca, Eduardo Duhalde, Jorge Brito, Coti Nosiglia y Luis Barrionuevo QUIEREN DESTITUIR A CFK".
Desde el macrismo decidieron eludir el tema. Tanto la vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal, como el candidato a diputado nacional por el PRO, Álvaro González, fueron consultados por los dichos de Macri, pero se desentendieron de las declaraciones.
Dentro de la red de microblogging, el misterio en torno al "círculo rojo" se convirtió en uno de los temas más mencionados.
Fuentes: LaCalleOnline/LaNación/Infonews
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